
Hay momentos que parecen sacados de un cuento, y la sesión de fotos de Aday fue justo así. Un viaje lleno de ternura, rodeado de texturas cálidas y ese aire mágico que solo los recién nacidos pueden traer consigo.
Desde el primer instante, Aday nos regaló gestos adorables, bostezos dulces y esa paz que transmite un bebé dormidito 🤍. Para esta sesión, preparamos un escenario especial: un globo de atrezzo que convirtió la sesión en una aventura, como si estuviera a punto de emprender su primer gran viaje 🚀.
Cada detalle, desde su gorrito hasta el tejido suave que lo arropaba, estaba pensado para reflejar esa dulzura natural de los primeros días. Y Aday, sin saberlo, nos regaló imágenes preciosas, de esas que te sacan una sonrisa cada vez que las miras 😊.
Las sesiones de recién nacido son así: una pausa en el tiempo, un momento para recordar siempre lo pequeños que fueron, lo rápido que crecen y lo bonito que es el inicio de su historia. ¡Bienvenido al mundo, Aday! 💫❤️
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